En este blog lo que hacemos es hablar sobre cannabis, pero el mundo del cannabis va mucho más allá de lo que estamos acostumbrados, del cultivo y las flores, de los terpenos y los cannabinoides, de lo medicinal y lo recreativo.
Existe un mundo aún más complejo que comprende otra parte de nuestros sentidos. parte de ello es el cannabis y el arte culinario. Esa relación simbiótica, ese universo inexplorado para muchos, en el que se combinan una cantidad de colores, olores, sabores y sensaciones. Nos fuimos a lo que en Hibrido (@hibrido_med) llaman, una cena clandestina. En cualquier barrio de Medellín, en una casa de amplios paredones en medio de un sobrio vecindario.
El ambiente de sábado por la noche le dio el primer toque esencial, acompañado con excelente música, una mesa delicadamente ordenada y una iluminación a la luz de las velas nos dio la bienvenida. Un grupo de amigos allí, una pareja de desconocidos ingresando por la puerta principal, todos provenientes de diferentes lugares de la ciudad y que nos reunimos para ese delicioso propósito.
El anfitrión, Santiago Colorado nos animó a todos, los allí presentes a buscar un lugar en la mesa que compartiríamos, una cordial invitación que en lo personal tomé como predisposición en cuerpo y espíritu para las viandas. El grato asombro no se hizo esperar. El entremés fue la primera delicia que nos llevamos a la boca y sirvió de preludio a los siguientes platos.
“…vegetales encurtidos, tiene en este momento una vinagreta de uchuvas y el de algunos de ustedes es de tofu salteado, especial…”
Santiago conoce de antemano los gustos de algunos de los comensales, que por preferir comidas sin carnes, reciben una preparación especial. Todo de la mano de un equipo de profesionales especialistas en las artes culinarias y en especial, estas cenas medicadas.
El cannabis es un elemento complementario importante. los platos que nos son servidos, están adornados con unas hojas de marihuana y está presente en los ingredientes. Para quienes consumimos de la planta sabemos que existe una relación directa entre el apetito y el “subidón” otorgado por los cannabinoides en el cuerpo. Los sabores se intensifican y amplían la sensación de placer al percibir esos sabores, cómo los ácidos y dulces que acompañaron esta comida. La experiencia se enriquece y brinda un confort adicional a sus ya conocidos beneficios. Los olores son mas fuertes y agradables y se tiene una completa sensación de las preparaciones que se suceden en esta cena.
“La entrada es una ensalada de trucha ahumada en aromaticas de la casa, especias y cañamo, acompañada de una vinagreta de uchuvas y vegetales encurtidos. Nuestro plato fuerte, curry de pollo de maní y arroz de lavanda, una ensalada de vegetales frescos y cebolla encurtida. Tiene en la base, en la ensalada un vinagre a base de mora… Buen provecho!…”
La descripción de cada plato prepara la imaginación y envía un mensaje al paladar. Al ser esta una cena medicada, permite a cada invitado decidir si desea unas gotas de aceite de cannabis; una infusión a base de los cannabinoides y terpenos de amplio espectro. El aceite al entrar en contacto con los ingredientes del plato, complementa positivamente el sabor y aporta un valor medicinal (físico y mental) para quien lo consume.
Bocado tras bocado, y en medio de la distensionada conversación y algunas risas, vamos disfrutando de ese momento. Algunos de los presentes eran familiares que se acompañaban en esta experiencia, otros eran amigos de la casa. Algunos por primera vez tenían la oportunidad de una cena de este tipo y otros estaban de viaje y esto hacía parte de conocer un poco mas sobre Medellín. Qué mejor forma de conocer personas con los mismos gustos y compartir estos alimentos exquisitamente preparados.
La experiencia culmina con un delicioso helado, mousse de aguacate y chocolate amargo, acompañado de maní garrapiñado, arena de coco, dulce de maracuyá y naranja deshidratada. El postre despide esa combinación de sabores y esta aventura.
Qué mejor manera en que el cannabis se compenetra con nuestro cuerpo y brinda un placer adicional. Que si la recomendamos? ¡Claro! Ojala todos los amantes de esta planta tuvieran oportunidad de interiorizar el cannabis de esta forma también, de hecho en Europa y algunas ciudades de los Estados Unidos ya es una práctica común combinar cannabis con la cocina y el poder disfrutarlo en nuestra ciudad es un gusto y un privilegio para aquellos que deseamos llevarnos al paladar algo diferente, algo con un poco más de magia.