Hablamos con Javier Becerra, una de las cabezas visibles que impulsan el funcionamiento de la Mesa Distrital Cannábica en Bogotá. Es un tema que ha sido mencionado en los medios nacionales, ya que se ha configurado en una fuerza de activismo, organización social y acción política que es un ejemplo en muchos aspectos para agrupaciones similares en el territorio nacional.
Nos contó sobre el pasado de su activismo, las acciones que llevaron a formar la Mesa y sus proyecciones hacia el futuro.
Para Javier el pasado en el activismo importa, y es crucial para llevar a cabo obras sociales y de cooperación en el ambiente cannábico que lleven a consolidar eventos masivos y un crecimiento de la participación ciudadana que hoy mira con otros ojos a los marihuaneros de Bogotá.
La historia.
Javier es un activista de vieja data y nos cuenta un poco cómo eran aquellos días en que los consumidores comenzaron a obtener información de la planta y formarse una idea más clara de lo que estaba sucediendo en el mundo.
– Javi Cannabis no se hizo de la noche a la mañana. Yo comencé a andar con combos marihuaneros desde muy joven en mi vida. En la universidad Nacional de Colombia comenzando en el 2000, comenzamos a hablar allá en la pública, cómo la de Antioquia, la UPTC de Tunja, la UIS de Bucaramanga o la del Valle en Cali… comenzamos a entender con la información que nos llegaba por internet. No teníamos textos, el producto intelectual de la comunidad cannábica no se veía. Teníamos a Jack Herer con su libro del Emperador Desnudo, las gacetas clínicas y científicas que hablaban de Mechoulam, algunos descubrimientos en Inglaterra, Alemania y en Europa básicamente. Desde Estados Unidos por lo demás no había actividad. En Bogotá el movimiento era muy tímido , yo creo que en todo el país era muy difícil encontrar una marcha. ni pensarlo –
Comparándolo con el panorama de hoy, las cosas parecen ser muy diferentes.
– Tu abres los chats cannábicos hoy día y te encuentras que, aquí en Bogotá hay 10 – 12 eventos por semana. Hay una cantidad de eventos de todo tipo, comerciales, recreativos, de rumba, fiesta, académicos. Hay una explosión enorme. –
– ¿Cómo se llegó allí? Mayo a mayo, marcha tras marcha. Era muy difícil, sin embargo nos fuimos abriendo paso a través de fumatones. Con Cannabis Derechos Civiles programamos plantones a los que llegábamos 6 u 8 personas. Nos tocaba ahí tímidamente fumarnos un porrito al escondido y salir. no había condiciones para hacer nada. Fueron momentos muy difíciles en que pensábamos que eso no iba a llegar a ningún lado. –
Su trayectoria en el activismo cannábico lo llevó por las vertientes de la política en una propuesta al concejo de Bogotá cómo candidato cannábico por la Alianza Social Independiente (ASI) en la que obtuvo alrededor de 700 votos. También ha participado en muchas otras propuestas que desembocaron en lo que hoy conocemos como la Mesa Distrital Cannábica
– Me decían – Javier, en serio usted quiere hacerlo así como Candidato Cannábico?
Yo les decía – Claro, entonces? No vale la pena hacerlo de otra manera! y no puedo tampoco – y me decían
– ¡No! Usted es un valiente! Someterse al escarnio de esta sociedad? es un valiente.
(luego de las elecciones) …yo me fustigaba, me criticaba a mi mismo, “que trabajo tan mediocre”, (pensé). Cuando comencé a darme cuenta lo que es ganarse 700 votos sin maquinaria, sin publicidad, sin plata. a porro limpio, calle por calle, barrios, parches, combos…
La gente me decía “usted es un berraco. Realmente lo que alcanzó es muchísimo”.
Ha sido una de las experiencias más hermosas que he tenido en mi vida. Hablando en la calle de marihuana. ¡Fue muy bonito! –
Luego de esa experiencia, 4 años más tarde fué llamado por una plataforma llamada ACTIVISTA que en ese momento era liderada por Luis Ernesto Gómez. El objetivo fué trabajar con el liderazgo de Javier, su causa y su visión para llevarla a una propuesta de ciudad.
– Ese proyecto no pudo culminar como nosotros queríamos, que era una lista al Concejo de Bogotá de solo activistas. No pudimos porque eso vale un poco de plata, se necesitan unos recursos enormes y no los teníamos. Pero en esos días la cosa política se movió de tal manera que el partido verde nos dijo, – Bueno… si ustedes no lanzan la lista, por lo menos nosotros les damos 6 puestos para que ustedes se nos unan –
– Nos pareció estratégicamente bueno, fue un buen ofrecimiento. Nosotros hicimos una elección interna y colocamos 6 personas en esa lista verde. Te cuento que de esas 6 personas, 2 salieron electos concejales. Tenemos 2 personas en el Concejo de Bogotá que son amigas de la causa, ya no son 2, ahora son como 8 de 45 concejales de la ciudad de Bogotá, porque hemos seguido creciendo en esa relación. Eso nos llevó hace poco, a estar como mesa en el Consejo. –
Esa historia, de salir a las marchas, a las fumatones, de aparecer en Televisión cuando de CityTV buscaban a alguien para hablar de los exabruptos jurídicos del gobierno Duque (según sus propias palabras). Esa permanencia, esa constancia le llevó a que cuando Luis Ernesto Gómez y ACTIVISTA pensaron en alguien de la comunidad cannabica lo buscaron a él. Lo buscaron, no como individuo sino como un producto social. Por ser activista y eso les llamó la atención
– Esto me llevó a trabajar al lado de quien hoy es la primera alcaldesa de una capital en Colombia, Claudia López. Trabajé a su lado y yo siempre salía con mi gorrita cannábica, la de las hojas de cannabis. Es una gorra que es icónica, que todo el mundo la ve y ya saben que ese es el “Javi”. Yo siempre salía con mi gorrita, y con ella (Clauda) haciendo campaña en la calle, y hablando con el combo. –
– Tanto que logramos una coalición que se llamó “de justicia social” donde le presentamos a ella en campaña y otros candidatos toda una propuesta para el tema cannábico. Para comenzar a entender el mundo y la causa del cannabis en Colombia. Fruto de eso (Que es una historia..digamos, no formal) es que Claudia siendo alcaldesa comenzó a buscar cual sería el recurso técnico más idóneo para comenzar a trabajar sobre cannabis, con los usuarios de cannabis. –
Los Inicios
Cuando la hoy Alcaldesa Claudia López, ganó las elecciones en Bogotá, la política que querían desarrollar necesitaba de actores con un peso específico y creíble que le diera una posibilidad de éxito. En Colombia hay una organización que se llama ATS (Acción Técnica Social) dirigida por Julian Quintero quien podemos catalogar como el técnico más informado en Colombia sobre política de drogas. Su experiencia como asesor de la vicepresidencia y luego durante la Bogotá humana, le dió un bagaje tremendo, llegando a realizar para la Secretaría de Salud la Semana Psicoactiva. Trajo médicos, investigadores, científicos, activistas de casi todo el mundo. Personas de mucho nivel.
– Entonces buscaron a Julian – continúa Javier – que hacía mucho tiempo había tenido relación con la comunidad cannábica, él fue tal vez uno de los primeros que comenzó con las marchas en Bogotá. Cuando lo llamaron desde la alcaldía y la secretaría de salud me llamó a mi que ya tenía una tradición de años. A través de Cannabis Derechos Civiles ya venía con ese sentir, con esa idea estratégica para la comunidad cannábica. –
– Con Cannabis Derechos Civiles me aparecía con mi bandera blanca que solo tiene la hoja de cannabis, ni letras ni nada, es una hoja verde de cannabis sobre una tela blanca, andaba para todo lado con ella. Si me llamaban de la Colombia Humana, alla estaba con mi bandera. Si los cristianos me llamaban alla estaba. Así me fui haciendo conocer. Entonces Julián me llama pero también llamamos a los que no estaban de acuerdo. –
– Sin duda era absolutamente posible que la respuesta no fuera la que esperábamos y se dió, sin embargo año y medio después varias de las personas que no acompañaron esas decisiones, hoy se están acercando de nuevo a decir “con ustedes es que hay que trabajar, yo quiero trabajar con ustedes de la forma en que lo están haciendo”. –
– Comenzamos a hablar con Julian en un lugar donde la comunidad se encontraba todos los miércoles. Si vamos a hablar de marihuana y vamos a hablar de comunidad cannábica, debíamos encontrarnos con la comunidad. nos pusimos una cita una tarde con los muchachos de Ciclocannabis y un poco de gente que ni siquiera se dieron cuenta que estaba pasando. Nosotros llegamos allá, comenzamos a hablar y dijimos “bueno… el martes vamos a hacer la primera reunión”. A la primera reunión llegaron alrededor de 25 personas, hoy día nuestras reuniones no bajan de 80 personas. Siempre son 80, en las últimas reuniones casi 100, hemos crecido… –
La actualidad de la Mesa Cannábica.
“¡Mira! estos marihuaneros cómo se organizaron !”
La Mesa Cannábica Distrital se reúne todos los martes. Sólo pararon en Diciembre de 2022, durante un mes. Podemos decir que es la única incidencia social que actualmente tiene una reunión semanal sin falta. Y no sólo eso. Sus reuniones se llenan, tienen asistentes nuevos de manera constante, que tiene una organización y lleva a cabo eventos de manera exitosa en la capital.
– Todo el mundo habla de qué bueno tener una organización con decisiones asamblearias, lo más incluyente posible, lo más diversa posible. Eso somos nosotros, casi que el ideal de una organización social postmoderna, contemporánea. Que las discusiones se den con nivel, que el nivel de conflicto sea el mínimo y bien tratado. Que tengamos vocación de futuro, que estemos construyendo cultura, es decir que tengamos nuestra propia música, nuestra forma de hablar, nuestros códigos de comportamiento, alimentación, hay hasta alternativas religiosas y filosóficas. Cuando ven esa completitud, esa inmensa complejidad la gente se aterra. –
– Momento tras momento hemos superado los indicadores. A pesar de todo pronóstico, tenemos una organización que va a cumplir dos años a la que no le daban mucho vuelo y ya hemos sacado varios eventos (Cannabis al parque, Cannabis Fest) que han sido espectaculares y han rebasado sus cifras. Ya tenemos asegurado el (Cannabis al parque) de este 2023 y para muchas personas esto es llamativo, ven una comunidad que sirve económicamente, políticamente, incluso para producir réditos sociales. Nos está pasando lo que nunca habíamos pensado, y es que alguien deseara ser amigo del marihuanero, muchos pensaban antes que el marihuanero era alguien al que se tenía que discriminar. Incluso pensábamos que nos lo merecíamos, nosotros nos discriminamos a nosotros mismos. Si te das cuenta lo primero que le dice hoy el líder cannábico al otro líder cannábico, es cuantos porros se pega. Si no pasa de “tantos” entonces no es marihuanero! –
No todo funciona a las mil maravillas. Durante todo el tiempo de este trasegar en el activismo son notables también los escollos e inconvenientes. Javier habla sobre las dificultades que encontraron y los vicios a los que aún hoy está sometida la misma comunidad cannábica a su interior.
– Hay una discriminación interna y externa que no nos ha permitido salir adelante. El sustrato cultural que nos deja el prohibicionismo, altamente prohibicionista y altamente discriminatorio. También ese falso interés o esa falsa creencia que algunos llaman el “Adanismo”, creemos que somos los primeros y los únicos en un mundo que está lleno de usuarios del cannabis. –
– También me llama mucho la atención que quienes criticaban todo modelo de organización social para los cannabicos, todo intento era criticable, condenable, era sujeto de escarnio público. Hoy día la mayoría de esas personas quieren hacer organización y quieren ser líderes de organizaciones sociales, y ahora si quieren hablar con la ciudad, con la sociedad, con la familia, con el estado, cuando hasta hace muy poco lo negaban por completo. No porque eso sea ilegítimo, quien niega que el estado y la sociedad y hasta la familia nos persiguió y nos maltrató. Esa historia no la podemos obviar de ninguna manera, pero los tiempos cambian. Hoy día para el activista cannábico situarse en cualquiera de los dos polos, en el polo de la crítica y en el polo de la discriminación eso es repetir la historia y permanecer donde estamos.-
– A qué me refiero con esas dos cosas. Nosotros nos discriminamos a nosotros mismos absolutamente en muchas cosas, Tenemos el látigo Colombiano en la mano. Cuando comenzamos a reunirnos, en las dinámicas al principio comenzó a darse una búsqueda de protagonismos que hemos venido aprendiendo a manejar. Esa dinámica de los liderazgos ahora me parece incluso conveniente que suceda, porque eso proporciona diferencias (variedad). Cómo sabes que eres bueno, o no si no te comparas? Es beneficioso que haya muchas opciones. Los liderazgos se deben construir no solo a través del tiempo, sino de las ideas, del fragor del roce con la gente y las situaciones. –
– El activismo de hoy en día, adolece en algunos casos de ese bagaje. porque ese bagaje no es simplemente hojas en el calendario, han sido momentos que construyen lo que hoy en día estamos viviendo en Colombia como una ideología cannábica, si se quiere. Yo creo que sí existe. Yo creo que comenzó a formarse desde entonces por eso es importante ese bagaje histórico. –
– Eso no fue por generación espontánea, no fue que un día cualquiera, dos o tres tipos se levantaron con las ganas de hacer una Mesa Distrital Cannábica y lo lograron. Esto tiene una trascendencia y tiene nombres. Aquí tiene mucho que ver el espíritu de Olmes Ortiz, claro que sí. –
– muchas personas piensan hoy que “si los marihuaneros pudieron hacerlo, entonces cualquiera lo puede hacer…eso es fácil. Estos manes no trabajan, les gusta lo fácil entonces eso es fácil” –
– Hoy día muchas de las personas que pensaban eso, se dieron cuenta que el usuario de cannabis no es tonto, que el usuario de cannabis que va a la mesa tiene argumentos y conocen la historia, han visto todo el recorrido y ahora que vamos teniendo resultados, reconocen el valor de ese respaldo que es mucho mas alto y ya lo hemo visto en los eventos que estamos desarrollando. –
Los frutos de la Mesa Cannábica Distrital
Cannabis al Parque Vol. 2
– Una de las virtudes que tiene hoy la Mesa distrital es que varios de sus miembros, muchos de sus miembros tienen historia, tienen “Background” en las luchas sociales, en las luchas políticas de este país, y sabemos que lo que ha pasado aquí, políticamente, ha sido, hasta ahorita que pudimos encontrarnos en un candidato y hacerlo elegir, siempre ha sido la historia de las divisiones, y los personalismos, de los egos, de las ambiciones personales. –
– Todas esas cosas eran nuestra mochila de interpretación y de actuar político, como nosotros nos pronunciamos políticamente, y una de las virtudes de la mesa ha sido saber llevar esas crisis internas de los líderes y ponerlas a funcionar. No digo que no se presenten, claro que se presentan diferencias y hemos tratado de sobrellevarlas, –
– Nos hemos encontrado con liderazgos armados en fragor de la lucha social, con historia, con antecedentes y formación. Ese ánimo de construir una nueva sociedad, una sociedad que sea más amorosa, que se hace en la política y en el conocimiento, no como un garrote, sino como el instrumento preciso de brindarle al otro la mano, amor, tranquilidad, pero también capacidad, recursos, inteligencia, insumos, posibilidades, y cuando uno ve esa transformación, creemos que el país se está transformando y creo que nosotros lo hemos sabido leer y entender y nos hemos montado en ese caballito. –
– Yo pienso que la mejor manera de graficar lo que yo te digo fué el Cannabis al Parque del pasado 19 de Noviembre (2022). Metimos entre 7 y 10 mil personas. Ese parque nunca se había llenado y lo llenamos. Todo el mundo estaba con el porro en la mano, y el que no estaba con un porro era porque lo estaba pegando… cero situaciones. Ni una pelea, no hubo problema de nada. –
– Los emprendedores, muchos de ellos a las 2 o 3 de la tarde me estaban diciendo, Javi, “Sold Out”, ¡todo vendido! Y sobre todo, tu veías a la gente sonriendo, pegandolo acá, sentados por allí en parchesito, con el perro, con la bici, tomándose una cervecita por aquí, un juguito por allá, hasta la policía mirando “Esos manes como se divierten de simpático”; no hubo situaciones. –
– Teníamos conferencias académicas, regalamos algo así como 3000 plántulas, entre plántulas y semillas. Un espectáculo de cannabis que realmente demostró lo que nosotros podemos lograr como comunidad y como sociedad cannábica, demostró muchas cosas, entre otras que nos somos una banda de proscritos detrás de una cortina de humo. Tenemos cultura, tenemos música propia, tenemos una manera de vestir propia, tenemos comida, una manera de comunicarnos con códigos que son aceptados entre nosotros mismos, tenemos código de comportamientos que es cuidar al otro: “Que pasó? Te dió la pálida, siéntate, mira, tomate esto ya llamó a alguien…” precioso! –
– A diferencia entonces de ese discurso anterior que solamente quería mostrar la discriminación, lo que nos hace el prohibicionismo, mostramos fue una cara nueva, una cara amable, diferente y sobre todo altamente productiva. –
Hablando especialmente de Cannabis al Parque, Javier nos cuenta su experiencia al encargarsele el discurso inicial del evento, en el que hizo un sentido homenaje a Olmes Ortiz repitiendo su famosa frase, “El Que Fuma marihuana conmigo no es mi amigo es mi hermano y si fuma del mismo bareto es mi hermano del alma!, y aquí estamos hermanos del alma, compartiendo…”
¿Qué sintió en ese momento de mencionar esas palabras y de hacer ese discurso?
– Yo sentí a Olmes, sentí a David Marcha, sentí al Plon, sentí a la compañera de Cali que tienen detenida, sentí a los niños que han maltratado en los CAI ́s acá, a las niñas que han violado, abusado, maltratado por tener un porro. Me sentí liberado también, sentí que realmente Colombia está cambiando, que Bogotá está cambiando. Que así como mi familia, mi casa cambió algún día y ya dejaron de ver a Javi como el marihuanero y ahora por el contrario es Javi quien les produce un orgullo enorme porque estamos haciendo ver la marihuana de una forma diferente, bonita, que hace ver, como dice mi mamá, lo que era malo, como algo bueno.-
– ¿Cómo hace uno eso? ni que fuera Merlin, lo estamos haciendo ver de esa manera. Eso fue lo que sentí. La capacidad que tiene la lengua, la boca, el cerebro, el corazón, esta comunidad, que tenía de conmover la sociedad. Si nosotros queremos cambiar, ese cambio definitivamente comienza es por dentro, en cada uno, en cada quien y luego se transmite a los demás, cuando yo se que quiero, que tengo y quiero ofrecer cosas bonitas, buenas cosas, la sociedad cambia, y yo creo que cambió, ese espíritu es el que estamos dejando en el marihuanero de bogotá y espero que en Colombia dentro de poco. –
– Que si se puede, que si alguien pensó que no lo puedes lograr, porque fumas o alguna otra razón, no es cierto, lo puedes lograr! Fácil no es, a nosotros nos ha tocado mamarnos cárceles, persecuciones, señalamientos, institutos de rehabilitación, terapia de choque. Todo eso nos ha tocado para hoy de manera resiliente poder decirle a todo el mundo que sí, que nos mamamos lo que nos mamamos, porque sabíamos que teníamos las llaves de un futuro mejor en nuestras manos y que esas llaves no eran de humo, que si son vegetales, son de hierba y tienen tallo, pero son las llaves que van a conmover a la humanidad, no solamente en económico, no solamente en las relaciones sociales. En lo que más sabemos y en lo que mejor hacemos, que es producir bienestar, calidad de vida, bacanería. –
– De nada sirven los medicamentos contra el cáncer si la gente continúa somatizando las situaciones sociales y volviendolas enfermedad. Nosotros somos una manera de entender la vida diferente, pienso que lo hacemos así por las características particulares de la planta.-
Lo que viene en materia de eventos y organización para la Mesa Cannábica Distrital es equiparable a lo que ya han realizado. Finalmente Javier nos pone en contexto en cuanto a los planes a corto y mediano plazo.
– Nosotros queríamos que la mesa se mantuviera como un espacio sin formalismos, sin nombre, sin directores, sin presidente, sin esa organización piramidal a la que estamos acostumbrados, sin lucha de clases. Sin embargo hoy por hoy (marihuaneros pero no desordenados) nos sentamos, lo pegamos, pero desde el día anterior, hacemos una invitación y una agenda de trabajo. Somos marihuaneros, somos gente de los combos, de las calles, de los parches que vienen de todas las localidades de Bogotá, pero somos ordenados, somos el nuevo marihuanero y hacemos una agenda, y tenemos un record y tenemos actas y llevamos un registro de cada reunión y de cada tema y así como tenemos la facultad de mirar hacia el pasado, hacia atrás hacia las primeras reuniones, también hoy te puedo decir que el Cannabis al Parque 2023 ya tiene presupuesto, ya tiene vida y esa aceptación. –
– Que una organización social diga que su evento del año entrante ya está garantizado, no es fácil. Son muy pocas y nosotros ya lo podemos decir. Muy seguramente este año vamos a ser reconocidos por decreto de la alcaldesa es lo que estamos buscando y ojalá que sea así. y después que viene? un reconocimiento por parte del Concejo de Bogotá. Y después que viene? Reconocimientos en las juntas administradoras de cada localidad. El alcalde local y las Juntas Administradoras Locales nos van a reconocer las mesas de cada localidad. –
– Lo que tenemos es agenda y trabajo. No solamente estamos creciendo hacia afuera, que la comunidad y la sociedad nos vea. Estamos creciendo hacia adentro porque en la medida en que crece la aceptación de la idea del cannabis que la mesa propone, también crecen las responsabilidades. Si queremos llegar a las localidades, tenemos que llegar con argumentos, con propuestas claras, y proyectos. Uno de ellos es “reducción de riesgos” que nosotros los llamamos como los llama hoy la academia “gestión del placer y el riesgo asociado” nosotros queremos trabajar ese tema, de la reducción del riesgo por consumo del cannabis. –
– Siempre, siempre, nuestro faro, lo que nos guía en este momento es “calidad de vida para el usuario del cannabis” y pensamos que no se logra, que no se puede lograr si no comenzamos a desmitificar a desdramatizar los posibles riesgos que usted tiene de consumir cannabis. Entre otras porque no tenemos acceso a la calidad del producto, del material vegetal. Nosotros no sabemos cómo nos llega la marihuana al porro. Meternos en esa tarea implica hablar con el narcotráfico, con el microtráfico y con los campesinos. Tenemos que meternos en esa cadena productiva y eso es un trabajo. –
– También es formar al usuario del cannabis. Hoy tenemos una tendencia universal, un punto de quiebre entre lo pasado y lo nuevo está en la manera en que como usted decide usar las cosas que tiene a su disposición y nosotros queremos que nuestros usuarios sean al mismo tiempo productores. Lo que la economista Mazzucato que es la que orienta al presidente de la República, habla de Prosumidores. Nosotros queremos ser esos prosumidores, es decir, alguien que produce pero también consume, usa los productos que necesita. No vamos a esperar que el porro te salga de una impresora 4D. Nosotros queremos que ese porro se siembre, crezca, se utilice y se cree intimidad entre la planta y el usuario. Que puedas encontrar de la gran variedad de plantas que hay, la que más seduce a tu corazón. Que sea la precisa para tratar tu dolencia.-
– Queremos trabajar ahí. Queremos ser un nuevo paradigma de usuarios de cannabis. Ya no solo somos consumidores, sino usuarios y prosumidores que conocen los productos y pertenecen a esa cadena de valor del cannabis. –