El 2 de Noviembre de este 2024, la policía Metropolitana de Bogotá informó a través de las redes de la Secretaría de Seguridad, la incautación de 80 kg de marihuana divididos en “tres tipos de marihuana“:
Inmediatamente los medios masivos de comunicación de nuestro país hicieron eco de esta noticia, sin ningún tipo de análisis o verificación de la información brindada por las autoridades, dado que la policía en su informe destacó que las tres tipos de marihuana: ‘la tipo Creepy,’ ‘la Tangie’ y ‘la Morada’. Esta última según sus especialistas, resultado de mezclar de fentanilo, tramadol y extracto de huesos humanos (!)
Las reacciones no se hicieron esperar, ya que si bien el porte de grandes cantidades de esta planta está prohibido en nuestro país y está tipificado como delito, a menos que se realice bajo la normativa de una licencia, la información entregada por las autoridades es engañosa y denota un galopante desconocimiento por parte de las diferentes instituciones a la hora de evaluar lo incautado y comunicarlo a la sociedad expectante.
Una de las entidades que reaccionó a estos informes, precisamente fue @echelecabeza, quienes hoy por hoy se han constituido en una autoridad en el análisis de sustancias psicoactivas en diferentes espacios a lo largo de las ciudades más importantes de Colombia.
En su respuesta al Tweet de la Secretaría de Seguridad, rememoran episodios anteriores en los que ha sido notable también la desinformación o el propósito de entregar una información tergiversada, lo cual termina aportando miedo y zozobra en la población poco relacionada con los diferentes términos del ambiente cannábico y que aumenta la estigmatización generalizada.
En su tuit también reclaman la respectiva verificación por medio de análisis químicos con los cuales se respalde tales informes, más allá de las categorías mencionadas por la policía y los tétricos ingredientes que mencionan.
La creepy, la tangie y la morada.
Segun la policía y por extensión, los diferentes medios de comunicación, el primer tipo de marihuana incautada es la “tipo creepy”.
El medio Infobae así lo describió en su nota al respecto: “se confirmó que ahora la marihuana tipo creepy estaría siendo comercializada en la capital mezclada con otras sustancias. Una de ellas es el fentanilo.” cosa que en los análisis hechos por Échele Cabeza resulta falso, de acuerdo a los análisis realizados cuando ha habido otras alertas de fentanilo en Colombia.
Las notas “periodísticas” que se encuentran al rededor del informe, son una fotocopia unas de otras, en diferentes medios, los cuales no profundizan ni se cuestionan los descabellados pronunciamientos, entre los que se mencionan la marihuana tipo “... Tangie que es una marihuana de sabor a mandarina y naranja“, desconociendo que las diferentes variedades de la planta tienen terpenos y flavonoides que expresan olores y sabores naturales en una amplia gama, lejos de ser un proceso artificial y dañino para la salud.
Al respecto se pronunció el medio de comunicación Culturacannábica.tv en donde describe muy bien estás características.
“…la cannabis no es una sola planta, sino un ecosistema de variedades con perfiles únicos, como la popular “morada” o la cítrica “tangie”, cada una con características y efectos distintos” escribió.
En comunicación con David Ponce, Psicólogo y Magister en Culturas y Drogas, nos aclara el panorama respecto a la visión que tienen las autoridades de la llamada marihuana tipo creepy.
“Lo que se quiere hacer entender como creepy es una marihuana de mayor potencia que la tradicional (regular, pangola, cafuche…) que era esa marihuana cultivada de manera artesanal, sin entender que hoy hasta en el mundo del comercio de marihuana, desaparece de cierta manera esa regular y ya lo considerado creepy es la flor de baja calidad; lo exótico es la calidad media o media-alta, y las flores cuando se refiere a la alta calidad. “
Continúa David aclarando “Entonces ahí el entendimiento de ellos (la policía) es el tradicional suponer que la marihuana tipo creepy, es una marihuana de más alta calidad, normalmente para ellos está relacionado con el tamaño de los cogollos y con el hecho de que no tiene semillas, de pronto una flor más llamativa, que huele de manera más intensa, entonces creen (con este termino) hacer referencia a una marihuana de más alta calidad y potencia cuando en términos del común están utilizando un término que se refiere a todo lo opuesto, una marihuana de baja calidad calidad“
Pero lo que más llamó la atención de los conocedores del cannabis en nuestro país fue la descripción que brindaron sobre “la morada” a la cual, medios como RCN Radio, basándose en las declaraciones del coronel, Juan Arango, oficial de guarnición de la Policía Metropolitana de Bogotá y difundieron como constituidas con una serie de ingredientes de terror.
“…la Morada que se caracteriza por su mezcla de cannabis, fentanilo, tramadol, formaldehído y lo que al parecer serían extractos de huesos humanos. Los traficantes buscan crear nuevos tipos de estupefacientes con el fin de generar una mayor adicción en las personas…“
Es de amplio conocimiento que la degradación y los componentes que le agregan a la marihuana de tráfico, históricamente corresponden a sustancias que permitan empacarla y transportarla sin ser detectada, es decir, es fruto de la prohibición y de la mal llamada “guerra contra las drogas” que realmente es una guerra contra las personas que están en medio del tráfico.
Tras estos informes tergiversados lo más responsable es que las autoridades brinden un protocolo de análisis químico de los materiales incautados y no solo generen aseveraciones sin fundamento, ya que la población en general se queda con la idea de que toda flor de cannabis que vean, estará modificada, manipulada y con adiciones que buscan la adicción y el deterioro de quienes las consumen. Para los conocedores y auto-cultivadores de plantas con olores a cítricos y con colores diversos, se les hace increíble que exista tanta desinformación aun cuando el presente gobierno se ha comprometido a avanzar en un desescalamiento de la persecución hacia las personas y en brindar mejor información para que nuestra relación con las sustancias, no sea desde el miedo y el mito, sino desde la cultura y el aprendizaje de esta nueva industria en nuestro país.
La alternativa siempre ha sido el autocultivo
En un país donde es legal el porte (hasta 20 gr por persona), el auto-cultivo, la producción para transformación y uso medicinal, sigue sonando bastante ilógico que las mismas autoridades, incluso de rango alto, tengan aún en su haber de argumentos estas aseveraciones sobre las sustancias que le agregan a la planta. Debemos reconocer que la regulación y la educación es el camino a evitar estos baches de información y la criminalización lo que hace es continuar ese círculo vicioso, donde lo más afectado es la vida de las personas y la percepción que tiene el común del ciudadano sobre una planta que en general, tiene muchos mas beneficios que los perjuicios que se le quieren señalar.