En una nueva entrevista de Cultura Cannábica TV, el Representante Alejandro Ocampo abordó diferentes temas. Esta conversación con Sebastián Ángel tuvo lugar el mismo día en que el presidente Gustavo Petro solicitó al Congreso la legalización del cannabis de uso adulto en Colombia. Durante su intervención, el mandatario destacó que la prohibición ha sido un factor clave en el aumento de la violencia en el país y reiteró la necesidad de regular el mercado para debilitar a las mafias y generar ingresos para el desarrollo social.

El representante Alejandro Ocampo inició la conversación con anécdotas del Congreso y situaciones derivadas del desconocimiento ciudadano sobre la marihuana. Estas percepciones erróneas son muchas veces generadas por el tabú y la desinformación.
“Llevé un tarro de mayonesa, de esos que la mamá de uno utilizaba después para guardar los botones o las monedas; estaba lleno de moños, de cogollos de marihuana. Lo llevé al Congreso para que vieran el producto, lo olieran, etc. El tarro de mayonesa se perdió.“
“Llevaba también unos tarritos más pequeños, tenían como cinco flores… también se perdieron… La gente recuerda mucho ese debate“.

Se refería a una agitada plenaria en la que se discutió la regulación del cannabis de uso adulto, en la que fue protagonista al llevar muestras de flores y comestibles con CBD.
El 20 de julio de este año 2025 se iniciará un nuevo periodo legislativo en el que de podrá debatir en el Congreso el proyecto de ley para regular el cannabis de uso adulto, una iniciativa que ha pasado por varias discusiones en el pasado sin lograr su aprobación definitiva. Sin embargo, Ocampo habló sobre otras alternativas para la comercialización vía decreto, como la venta de flor seca de tipo medicinal, incluyendo tratamientos con THC para consumidores con un dictamen médico. Además, mencionó la posibilidad de regular bebidas y alimentos para animales a base de cannabis.
En cuanto a la importación de flor de cannabis desde Canadá, mencionó que se reunieron con el ICA y lograron un acuerdo distinto, estableciendo mesas de estudio y que junto a Procolombia se podrá fomentar la exportación en lugar de la importación, cerrando así una polémica que había generado controversia en semanas recientes.
También habló sobre la creación de asociaciones o clubes cannábicos para el autocultivo y aprovisionamiento. No obstante, enfatizó en la necesidad de analizar a fondo el tema, considerando las realidades sociales y de violencia que ocurren en zonas apartadas de Colombia.
Quitarle el negocio a las mafias

El representante destacó la importancia de regular el consumo de cannabis de uso adulto (e incluso otras sustancias), a pesar del costo político que ello implique, ya que su principal objetivo es debilitar el negocio del narcotráfico y regular los precios. Explicó que un kilo de cocaína puede llegar a costar 25.000 dólares, y mientras no se logre regular el mercado, los grupos armados desmantelados regresarán “con unas armas” a reclamar el negocio.
“En Colombia hay gente que está dispuesta a matar y morir por esto, porque es un país pobre!” mencionó el representante. “Estamos dejando que la plata se vaya para los mafiosos, y no para hacer vías o para construir colegios…” agregó.
Tenemos un país doble moral y conservador
Ocampo se refirió a la influencia de personas en el poder que están involucradas en el negocio de las drogas, algo que considera innegable. “Hemos sabido que familias están en ese negocio y hasta a embajadores les han encontrado laboratorios en sus propias fincas“.
Señaló la importancia de poner la discusión sobre la mesa y continuar la lucha desde la Comisión de Drogas del Congreso. Sin embargo, también criticó algunas posturas dentro del movimiento cannábico, en las que percibe una desconexión entre el discurso y las posibilidades reales de regulación. “Libre como el cilantro! Sí, yerba libre!… Pues no… Yo comparto esa idea, pero en el modelo actual no es fácil… Si empujáramos entre todos, las cosas serían diferentes, porque el Estado y las cortes entenderían que esto pasa“.
Alejandro invitó a los “marihuaneros enclosetados” a salir a la marcha y manifestarse contra el prohibicionismo. Mencionó que, a veces, los congresistas se quedan solos en la pelea debido a las exigencias inflexibles de algunas personas del movimiento, que no se alinean con lo que es viable jurídica y políticamente en este momento. También hizo un llamado a la unidad y a la pedagogía, instando a educar a quienes desconocen o tergiversan los asuntos del cannabis. “Esas personas son tercas, pero debemos hacerles entender”, concluyó el representante.